En los análisis foliares siempre hay un apartado de microelementos. Estos elementos se encuentran en el tejido vegetal en concentraciones muy bajas pero tienen un importante papel en el metabolismo de la planta. Si alguno de estos microelementos faltase la planta tendría graves problemas en su desarrollo al no poder completar todas las fases de su metabolismo de forma adecuada.
Su deficiencia en el césped es muy frecuente ya que se bloquea su absorción a pH altos y se ve más afectado cuando las siegas son frecuentes.
En condiciones de deficiencia las hojas se vuelven cloróticas entre los nervios , o con manchas amarillas. Aun siendo un elemento poco móvil, los síntomas se pueden ver tanto en hojas viejas como nuevas.
En céspedes con una siega muy baja y frecuente a veces solo se muestra desecación en la hoja. Cuando la hoja es más larga los sintomas son más el blanqueamiento de las hojas y motas entre las venas mientras los margenes permanecen verdes.
Se puede concluir que los micronutrientes estan muy afectados por los pH elevados y para evitar deficiencias lo mejor es controlar el pH entre 6.5 y 7.
Para medir el pH del suelo existen en el mercado una gran variedad de soluciones. Pero al final lo más práctico es tener un sensor de calidad y de bolsillo como el sensor de pH SoilStick que nos permite medir tanto en suelo húmedo, como en agua o en mezclas líquidas.