El hierro es un nutriente esencial para la producción de nuestros céspedes, tiene un papel fundamental en la fotosíntesis (si bien no es parte estructural de la molécula de clorofila, está implicada en su manufractura), pero además cabe destacar otras propiedades que vamos explicar a continuación.
El sulfato de hierro es comúnmente utilizado como enmienda de suelo para disminuir su pH y provocar entre sus efectos beneficiosos la disminución de lombrices de tierra, aunque también son de destacar las propiedades herbicidas sobre musgos y malas hierbas de hoja ancha, a la vez que favorece el crecimiento del césped. Otra característica favorable es el endurecimiento y el reverdecimiento, especialmente de cara a otoño e invierno.
El nitrógeno estimula el crecimiento rápido, no deseable para el otoño e invierno por el riesgo a la aparición de enfermedades tales como la causada por el hongo Microdochium nivale o daños por heladas, sin embargo el hierro genera resistencias a éstos.

El hierro puede presentarse en forma mineral dentro de formulados de fertilizante o quelatado. Las formas quelatadas son moléculas orgánicas que hacen más soluble y fácil de tomar por las raíces el elemento quelatado, en este caso el hierro. Así, el EDDHA es considerado uno de los quelatos más estables dentro de los más amplios rangos de pH.
El sulfato ferroso tiene un papel importante para el control de musgo, como herbicida de hoja ancha y control de lombrices de tierra. Esta molécula se inoniza en Fe+2 y SO4-2, los sulfatos se combinan con iones de hidrógeno del agua para formar ácido sulfúrico con la consecuente bajada de pH. El efecto de quemazón sobre la zona foliar del musgo es debido a que éste no presenta raíces verdaderas y toda la absorción se realiza de forma foliar, produciéndose toxicidad en la aplicación de este sulfato ferroso, mientras que la quemazón en las malas hierbas de hoja ancha sólo es transitoria por la presencia en éstas de raíces y su actividad regenerativa como rizomas, estolones y rebrotes desde las raíces. Es recomendable el riego posterior al uso de sulfato ferroso por su capacidad de quemazón sobre el césped.