Yellow Tuft

Yellow tuft es una enfermedad fúngica causada por el hongo de agua Sclerophtora macrospora. Ocurre en la mayoría de los céspedes, pero es más común en Agrostis y Poa Annua. Los factores de riesgo son áreas con mal drenaje, excesivamente regadas y con altos niveles de thatch.

Los síntomas son pequeñas manchas amarillas repartidas por toda la superficie cespitosa, a menudo siguiendo la humedad o el rocío.

Las plantas infectadas generalmente no mueren debido a este obligado parásito, pero queda comprometida su jugabilidad y apariencia. Las raíces de las zonas infectadas son cortas y se presentan a modo de “manojos”, que se arrancan facilmente.

El examen de la zona revela que las áreas afectadas se presentan ligeramente sobreelevadas respecto a las no infectadas. Además de ser fácilmente arrancadas de la superficie. Se presentan como conjuntos densos de plantas que emanan de la misma corona, debido a la producción de hormonas por parte del patógeno en la corona de las cespitosas. El amarilleamiento es el resultado de la profusa producción de esporas del hongo. Estas esporas nadan (zoosporas), de ahí que la distribución sigue las líneas de mayor humedad.

Los Esporangios son los productores de las zoosporas , que se desarrollan sobre la superficie de la hoja en las cavidades sub-estomatales bajo la epidermis. A primeras horas de la mañana, el esporangio blanquecino es visible a través de simples lentes de mano. En los meses de verano las plantas afectadas aparecen verdes y saludables.

El hongo afecta a las resiembras, de ahí que suelen observarse en primavera donde se realizó resiembra otoñal.

El patógeno es activo durante periodos de tiempo frío y húmedo, en áreas con pobre drenaje o con exceso de riego. El control cultural pasa por mejorar el drenaje, evitar riego excesivo, acumulacion de thatch, airear y aumentar los recebos ligeros.

El control químico incluye fungicidas tales como mefenoxam y metalaxil. Otros como Fosetyl Al, presentan menor eficacia que los anteriores, se aconseja su mezcla con Clortalonil para una acción más sinérgica. No obstante, el tratamiento curativo es difícil y un tratamiento preventivo en base a intervalos de 14 a 21 días es lo más adecuado cuando las condiciones atmosféricas lo indican.